La ciudad de Cordoba se caracteriza por tener una gastronomía, que se ha visto enriquecida por todas las culturas que han convivido en esta ciudad a lo largo de los siglos. Los romanos trajeron el aceite de oliva, los árabes las verduras, frutos secos y los sabores agridulces, los cristianos la carne y los judíos deliciosos postres.